Ben Smulders ofrece claves sobre cómo compatibilizar las ayudas de Estado con la política industrial
El pasado lunes 11 de marzo, la Cámara Oficial de Comercio de España en Bélgica y Luxemburgo celebró un nuevo almuerzo-debate en el marco de su tribuna “Círculo de Negocios”, en el que Ben Smulders, director general adjunto para Política de Ayudas Estatales en la Dirección General de Competencia, habló sobre “Reconciliar la política industrial y la política de competencia: Next Gen, PIICE y más allá”.
El presidente de la Cámara, Pablo López-Álvarez, abrió el evento destacando la extensa trayectoria profesional del ponente e introduciendo el tema a debate, al destacar la importancia de que las instituciones acierten al encontrar el equilibrio adecuado entre las políticas industriales y las de competencia.
Seguidamente, Lena Sandberg, socia de Gibson Dunn, empresa patrocinadora del evento, quiso ofrecer el punto de vista de la compañía con relación a los Proyectos Importantes de Interés Común Europeo (PIICE), proyectos estratégicos en diferentes sectores que requieren inversiones conjuntas de autoridades públicas y las industrias de diferentes países de la UE.
Tal y como recordó Sandberg, en el periodo 2020-2024 se aprobaron ocho PIICEs, una cifra que para la representante de Gibson Dunn “no es suficiente”. En ese sentido, cuestionó los actuales requisitos para que un proyecto adquiera dicha denominación y afirmó que dichas reglas “pueden no ser útiles a la hora de diseñar PIICEs”.
El papel de las ayudas de Estado
A continuación, Ben Smulders contextualizó el paradigma actual del control de ayudas de Estado tras las sucesivas crisis que en los últimos años han dañado las economías de los países de la UE. “En los últimos 20 años, las ayudas de Estado se han incrementado”, dijo Smulders, afirmando que actualmente el monto destinado a las ayudas es de cerca “del 1% del Producto Interior Bruto de la UE”.
En este contexto, el objetivo de la Unión está puesto ahora en afianzar una estrategia de crecimiento basada en las tecnologías verdes y digitales. Para ello, es fundamental que las instituciones europeas encuentren un equilibrio al ofrecer ayudas a los Estados miembros. “A nivel conceptual, no hay un conflicto inherente entre las ayudas de Estado y la política industrial”, explicó el ponente.
Asimismo, Smulders aseguró que es necesario “elegir la política de ayuda adecuada para resolver cada fallo de mercado específico” de manera que “los recursos se utilicen de la forma más eficiente posible”. El papel de las ayudas de Estado, en ese sentido, debería ser el de impulsar las inversiones en tecnologías o sectores de vanguardia que no puedan ser abarcadas en solitario por las industrias a nivel privado.
Tras la ponencia, hubo una ronda de preguntas y respuestas en la que surgieron temas como si hay más ayudas previstas en el sector de las energías renovables. La Cámara agradece su asistencia a todos los participantes por hacer del evento un nuevo éxito, así como a Bodegas Virgen de la Asunción por haber colaborado con el patrocinio del vino.